Carta a una estrella en el firmamento : PAUL RENAUD
Querido Paul, siendo
esa estrella en el Universo, seguirás iluminando al amor de tu vida, tu tierna
y encantadora MONIQUE, a toda tu familia preciosa a la que le inculcaste
unión y solidaridad a partir de tu
ejemplo de liderazgo familiar y comunitario.
Estarás desde arriba animando a tu
hermana JEANNE-FRAN siempre tan unidos, ella tan dinámica como tú. Mi
protectora y guía cuando más lo necesitaba al llegar en primavera del 2012 a tu
bella ciudad Lieja, la ciudad ardiente ! Aún recuerdo esa fiesta de vecinos en el parque de Xhovémont, a Monique y Jeanne-Fran quienes me atrajeron con su luz propia, fueron como dos luciérnagas luminosas para iluminar mi sendero recién llegada de Francia.
Seguirás desplegando
tu luz en todos los seres que acompañaste, que ayudaste, siempre sonriente,
prudente, optimista, con mirada traviesa.
Todo el tiempo tan
servicial con tu comunidad en Sainte- Julienne, sin queja alguna, con la mayor
voluntad del mundo para ayudar en la iglesia, a las personas solas, enfermas del cuerpo y del alma.
Recordaré siempre
las cenas compartidas en tu casa, durante las reuniones y festividades en la
sala de festejos, cantando juntos en la coral así no supiera cantar, con mi voz destemplada, me
incluyeron !
Recordaré siempre
las veces nostálgica que toqué a tu puerta sin avisar con aquella campanita tan original y
salías con Monique, con Jeanne-Fran tan sonrientes para invitarme a un café de
la amistad, dispuestos siempre a escucharme. Acompañarme. Invitarme a varias
actividades para no sentirme sola sin familia.
Anoche pensando en
ti Paul y el dolor de tu ausencia para tu familia y todos los que te
apreciábamos, recordaba con una sonrisa en medio de la tristeza, las veces que
me llevabas a la Galería con mis obras y peroles. O cuando me llamabas para
decirme si íbamos a buscar un mueble antiguo para restaurarlo y ponerlo en
casita, amoblando poco a poco mi nuevo hogar. Monique y Jeanne-Fran operando
con discreción para darme una mano siempre con tanto afecto, cariño. Y tú las secundabas. Siempre dispuesto.
Recuerdo en una
conversación después de la misa dominical, mientras tomábamos todos un café que
comenté buscar una casa con 3 habitaciones para la reagrupación familiar por si
alguien sabía de una en el vecindario.
Poco después mi adorada Jeanne-Fran se aparece en el apartamento inicial para decirme que me tenía una sorpresa. Una casa de dos pisos con tres habitaciones, y al precio ideal !! Esos regalos y detalles nunca se olvidan.
A los días entro a la casa y descubro cortinas puestas, con encajitos, preciosas y me puse a llorar. Entre uds tres se pusieron de acuerdo para manarlas a hacer e instalarlas como regalo para mí. En Francia nunca tuve esa acogida, ni esos detalles que me hicieron tomarles tanto aprecio y por eso lloro hoy por tu partida inesperada.
Ahora entiendo cuando llegué a Lieja en tren. Al abrirse la puerta, dos arco-iris me recibían, como anunciando una nueva era, mi nuevo hogar. Donde sembraría raíces sin seguir huyendo de la violencia.
Que los colores llegarían a mi vida de nuevo. Que aquí encontraría otra familia, sanación y que podía volver a creer en que los sueños si se hacen realidad cuando te valoran, te respetan y te hacen creen en el amor sincero.
Gracias infinitas desde la Tierra por tanto amor incondicional, por tantas oraciones compartidas y agradecimientos a Dios durante nuestros cantos. Nunca olvidaré tu presencia serena y tu afecto sin esperar nada a cambio. Seres como tú deberían llegar más a la Tierra.
Es cierto que Dios envía seres alados disfrazados de personas. Brilla para todos en tu estrella mágica, porque es tu legado para todos. LA MAGIA DEL AMOR!
Salúdame a mis ángeles guardianes y recibe toda mi gratitud por toda la eternidad. Nos veremos un día no muy lejano para celebrar con esos vinos celestiales que tanto te gustaban y compartías conmigo junto a las encantadoras Monique y Jeanne-Fran!
TE QUIERO MUCHO querido PAUL !!